Ficha 3 - 1ro SECUNDARIA | Texto 2 La violencia entre iguales en la adolescencia | COMUNICACIÓN

 


Si no puedes concentrarte leyendo sol@, leamos juntos. FICHAS DE APRENDIZAJE DE COMUNICACIÓN 1ro secundaria | Ficha 3 - La violencia en la sociedad Texto 2: La violencia entre iguales en la adolescencia y su prevención desde la escuela Adaptado de Díaz-Aguado (2005). Audio de La violencia entre iguales en la adolescencia y su prevención desde la escuela | Leemos juntos _______ Micrófono Maono DM30: https://bit.ly/3L8TdAH Usa el código 'cintbel' y recibe 10% de descuento: https://bit.ly/3HfVGrV





Texto 2: La violencia entre iguales en la adolescencia y su prevención desde la escuela

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Características de los agresores

Entre las características observadas con más frecuencia en los agresores destacan las siguientes:
Una situación social negativa, aunque tienen algunos amigos que les siguen en su conducta violenta; una acentuada tendencia a abusar de su fuerza (suelen ser físicamente más fuertes que los demás); son impulsivos, con escasas habilidades sociales, baja tolerancia a la frustración, dificultad para cumplir normas, relaciones negativas con los adultos y bajo rendimiento, problemas que se incrementan con la edad; tienen dificultad de autocrítica. Entre los principales antecedentes familiares suelen destacarse: la ausencia de una relación afectiva cálida y segura por parte de los padres, y fuertes dificultades para enseñar a respetar límites, combinando la permisividad ante conductas antisociales con el frecuente empleo de métodos coercitivos autoritarios, utilizando en muchos casos el castigo físico. En el estudio que hemos realizado con adolescentes (Díaz-Aguado, Martínez Arias y Martín Seoane, 2004) también se refleja que los agresores tienen menor disponibilidad de estrategias no violentas de resolución de conflictos, detectando además las siguientes carencias, en torno a las cuales convendría orientar también la prevención de este problema:

1. Están más de acuerdo con las creencias que llevan a justificar la violencia y la intolerancia en distinto tipo de relaciones, incluidas las relaciones entre iguales, manifestándose también como más racistas, xenófobos y sexistas. Es decir, que tienden a identificarse con un modelo social basado en el dominio y la sumisión.
2. Tienen dificultades para ponerse en el lugar de los demás. Su razonamiento moral es más primitivo que el de sus compañeros, siendo más frecuente entre los agresores la identificación de la justicia con «hacer a los demás lo que te hacen a ti o crees que te hacen», orientación que puede explicar su tendencia a vengar reales o supuestas ofensas. Y se identifican con una serie de conceptos estrechamente relacionados con el acoso escolar, como los de delator y cobarde, que utilizan para justificarlo y mantener la conspiración del silencio que lo perpetúa.
3. Están menos satisfechos que los demás con su aprendizaje escolar y con las relaciones que establecen con los profesores.
4. Son percibidos por sus compañeros como intolerantes y arrogantes, y a la vez como que se sienten fracasados. El conjunto de las características en las que destacan sugiere que cuentan con iguales que les siguen en sus agresiones, formando grupos con disposición a la violencia, en los que se integrarían individuos que han tenido pocas oportunidades anteriores de protagonismo positivo en el sistema escolar.

La prevención y el tratamiento de la agresión

Los resultados expuestos ponen de manifiesto la importancia que tiene erradicar situaciones de exclusión del protagonismo académico desde las primeras etapas educativas, y favorecer la identificación de los adolescentes con los valores de respeto mutuo, empatía y no violencia, para prevenir el acoso. Para cuya erradicación no basta con enseñar habilidades de resolución de conflictos, una de las perspectivas más habituales, sino que es preciso insertar la prevención en un enfoque más global, en el que se debe:

1. Enseñar a condenar toda forma de violencia favoreciendo una representación que ayude a combatirla. Nuestras investigaciones reflejan (Díaz-Aguado (Dir.), 1996, 2001, 2004) que conviene orientar el rechazo a la violencia desde una perspectiva que incluya tanto su rechazo de forma general, independientemente de quién sea la víctima y quién sea el agresor, como un tratamiento específico de sus manifestaciones más frecuentes: la violencia de género y la violencia entre iguales, en la escuela y en el ocio. Las medidas disciplinarias deben contribuir a este objetivo ayudando a generar cambios cognitivos, emocionales y conductuales, que permitan que el agresor se ponga en el lugar de la víctima, se arrepienta de haber empleado la violencia e intente reparar el daño originado. La eficacia de estos tres componentes mejora cuando se integran en un mismo proceso.

2. Favorecer la identificación con el respeto a los derechos humanos, estimulando el desarrollo de la capacidad para ponerse en el lugar del otro, motor básico de todo el desarrollo socioemocional y que en sus niveles más evolucionados se extiende a todos los seres humanos; así como la comprensión de los derechos universales y la capacidad de usar dicha comprensión en las propias decisiones morales, coordinando dichos derechos con el deber de respetarlos. Al incluir el rechazo a la violencia dentro de esta perspectiva, conceptualizándola como una grave amenaza a los derechos humanos, se favorece su comprensión como un problema que afecta a cualquier individuo, puesto que pone en peligro el nivel de justicia necesario para que se respeten también sus derechos.

3. Desarrollar alternativas a la violencia: estableciendo contextos y procedimientos alternativos en el sistema escolar, a través de los cuales de forma normalizada (sin que nadie se sienta amenazado en ellos) puedan expresarse las tensiones y las discrepancias y resolverse los conflictos sin recurrir a la violencia (a través de la comunicación, la negociación, la mediación…); y promoviendo habilidades en todos los individuos (alumnado, profesorado…) que permitan afrontar la tensión y resolver los conflictos sin recurrir a la violencia.

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